martes, 4 de diciembre de 2012

Cuidado con lo que deseas...

Tengo miedo. Sí, he pedido la luna y ahora que la he conseguido, temo que yo no sea lo suficientemente fuerte como para poder sujetarla sin herirme ¡Es tan fácil desear y creer que somos dignos de lo que pedimos! Pero, ¿quién nos ha dicho que seamos los dueños de la luna? Quizá la luna esté a gusto en el cielo, sin que nadie la moleste. Quizá se sienta avergonzada porque todo el mundo la mira y la piropea. 

¿Nos equivocamos al desearlo todo? El ser humano está hecho de sueños, de metas a las que llegar, de cimas que escalar... Y yo como ser humano, he hecho todo lo posible por poder llegar a la cima de esa montaña, y ahora, una vez ya lo he conseguido, no sé si es lo correcto, si solo es un capricho, o si voy a salir dañada... 

Sea como sea, siempre he seguido una filosofía de vida que dice: Sigue tus instintos, suelen ser más sinceros que las voces de tu cabeza, y no voy a dejar de seguirla ahora solo porque tenga miedo.


Y vosotros, ¿qué creéis? ¿Os gusta jugar a soñar?